-Te echo de menos...
+Estoy aquí
-Sí...
+ ¿Qué ocurre?
-Nada
(coge su mano y la mira)
+Dime
-....
+Muy bien. Como quieras.
(se da la vuelta y se va)
-No era capaz de decírtelo.... decirte que echo de menos esas veces en las que te interesaban las cosas que te proponía. Esos momentos en los que me decías cuan importante era para ti, lo feliz que te hacía o lo mal que lo pasabas cuando no hablábamos...
Echo de menos sentir que lo soy todo para ti, que sigo siendo para ti lo que fui: tu vida entera. Que ocupaba tus pensamientos y era la más especial para ti...
Echo de menos que te metas conmigo pero después haya ese momento de dulzura. Que cuando peleemos no nos hagamos daño, si no que nos digamos con palabras suaves (aunque a veces bordes) que queremos arreglarlo.
Echo de menos que a pesar de que no te gusta expresar lo que sientes, lo hagas por mí. Que me llames sin razón, me despiertes con un "buenos días, mi vida" o de repente, sin venir a cuento, me digas te quiero.
Echo de menos que hablemos de cualquier cosa, de las más absurdas chorradas, sin quedarnos callados o ausentes... Sentir que soy algo más para ti.
Echo de menos que me ames...
(siente que alguien la abraza por detrás)
+Siento haberme ido.
-No importa...
+ ¿Por qué no quieres decirme qué ocurre? Ahora estamos bien.
-Es cierto, estamos bien...
("pero no es lo mismo.." piensa para sí)
+Te quiero.
-Y yo a ti..
Y siempre será "Te quiero". Pero hasta que todo vuelva a ser como antes, ese sentimiento no puede evitar estar ahí...
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